viernes, 24 de mayo de 2013

Construyendo felicidad

Y entonces todo encajó, todas las piezas estaban ahí por un hecho, un hecho que se escapaba ami razón, dejé de sentarme las madrugadas a escupir tristes y oscuras palabras a la única luz que veía en un simple papel, dejé atrás las rutinas de llorar tristes y amargas frases con el afín de liberarme el "alma".
Ya no quedaba nada de ella, en su vida había entrado la razón, la coherencia, el amor al fin y al cabo.
Todo había cobrado sentido desde que el llegó, no fue fácil, no ha sido fácil llegar a la comprensión total (parcial en algunos casos) no ha sido fácil modificar pequeños errores, o pequeños agujeros mal tapados en nosotros mismos, no ha sido fácil aceptar los errores que nos presentábamos el uno al otro, pero me satisface mirarte a los ojos y ver todo el camino recorrido junto a ti, por que para llegar a la plenitud total de algo tienes que haber bailado bajo muchas tormentas.
Ahora vengo aquí, más bien susurrando versos, intentando explicar el por que no consigo expresar con palabras todo lo que me mueve a sonreir, a creer, a ver que hay que mirar en la misma dirección para poder observar el mismo camino, ver la misma perspectiva para poder apalidar el problema, para resolverlo, para poder dejarlo atrás y seguir caminando a tu lado.